Nuestra región es cuna de increíbles jugadores y jugadoras en potencia que, con un gran desarrollo alcanzado en los clubes de la zona, han volado alto y se han ido a otras instituciones deportivas que compiten en divisiones más grandes.
Joaquín Cornaglia es oriundo de Marull y probó lo que era el fútbol de la mano del Carlos Guido Spano, club donde hizo Inferiores. Ahora, con mucha más cancha pero aún también con mucho que aprender, juega en la Octava División de Belgrano de Córdoba.
Joaquín Cornaglia es oriundo de Marull y probó lo que era el fútbol de la mano del Carlos Guido Spano, club donde hizo Inferiores. Ahora, con mucha más cancha pero aún también con mucho que aprender, juega en la Octava División de Belgrano de Córdoba.
A pesar de su destreza con la pelota y lo cómodo que se lo ve en el equipo Pirata, Joaquín llegó al club de la ciudad de Córdoba recién en febrero del 2020. Con todas las ganas y un corazón lleno de esperanzas, el marullense se calzó la Celeste y arrancó, poco sabía que a la vuelta de la esquina lo esperaba una pandemia que dejaría todo en stand by durante meses.
Con unos pocos entrenamientos presenciales, menos de los esperados y más de los que otros tuvieron durante el año pasado, en lo que duró el aislamiento las practicas se llevaron a cabo de forma virtual. Según cuenta Joaquín, además de asegurarse de que llevasen adelante un buen entrenamiento físico, el cuerpo técnico priorizó la salud mental de todos los jugadores.
Cada lunes los entrenadores enviaban una planilla con una serie de entrenamientos para cada día, con este tipo de preparación física tan poco convencional el cuerpo técnico debía hacer malabares, como tantos otros clubes, para llevar un control de cada jugador. De esta forma, Joaquín manifestó que realizaban dos videollamadas por semana.
“Hacíamos una videollamada para hablar directamente con ellos y ver cómo nos sentíamos, cómo la estabámos pasando. Y a su vez teníamos otra en la que veían nuestro entrenamiento y analizaban cómo estabámos físicamente”
Luego de un 2020 más que inusual y complicado, las ganas de volver a la cancha eran increíbles. Es por ello que el jugador entrenó y se acondicionó todo el pasado año enfocado en el retorno a los partidos y las prácticas, pensando siempre en mejorar.
En palabras de Joaquín, el plantel está en sintonía y son muy allegados, lo que hace que el juego fluya más fácil y se logren buenos resultados. Tanto en AFA como en la Liga Cordobesa al equipo le está yendo más que bien, están haciendo un gran torneo con “muy buenos partidos en lo que va del año” y añoran quedarse con el campeonato.
“Me preparé todo el año pasado para competir de la mejor forma este año y me siento bien en el club ya que el grupo es muy unido y el club te hace sentir cómodo”