
Si bien el 2020 fue un año por demás complicado para todos, hay algunos que la tuvieron peor que otros. La Escuela Municipal de Handball de Río Primero, hacía un año que estaba activa cuando llegó la pandemia y se vieron obligados a dar marcha atrás en sus actividades debido al aislamiento.
La Escuela comenzó en el 2019 con la finalida de incrementar el trabajo en las categorías formativas, tanto masculinas como femeninas. Ese primer año fue más bien de diagnóstico, con la finalidad de ver la respuesta de la comunidad hacia este nuevo espacio de trabajo.
En los jóvenes la recepción fue por demás satisfactoria, tanto así que tuvieron la posibilidad de participar en el torneo Clausura de la Federación Cordobesa con Menor Femenino y Menor y Cadete Masculino. Mientras que con los Mayores concurrieron a la Copa Leones en Femenino y en el Torneo de ascenso en Masculino. En palabras del entrenador, Rubén Romano, esto les permitió “plantearnos nuevos objetivos, de hecho más ambiciosos, siempre contando con el apoyo de la Institución”.
Ya durante el año pasado, con el sueño de ser parte de la Federación Cordobesa de Handball, arrancaron en febrero y estuvieron un mes entrenando de forma intensa, hasta que se vieron obligados a cortar con las clases presenciales. En un comienzo, y con la idea de no cortar el ritmo, realizaban reuniones o prácticas virtuales, pero con el tiempo los jugadores y jugadoras fueron perdiendo interés y por ello se decidió suspender todo.

“Noviembre y diciembre realizamos prácticas, más que todo a manera recreativa, dada la necesidad de movimiento de los jóvenes. Sirvió para sentar las bases para empezar este nuevo año, con nuevos desafíos” explicó el entrenador
Con la llegada del nuevo año la temporada también comenzó en febrero, teniendo en cuenta que los torneos tenían fecha de inicio en abril. Antes del incio del Torneo Apertura, todas las categorías puedieron disputar amistosos y así probar su rendimiento. En cuanto al campeonato, este tuvo la posibilidad de comenzar y el equipo jugó las dos primeras fechas antes de que se suspendieran las competencias de deportes amateurs.

Respetando los protocolos al pie de la letra, los entrenamientos se realizan martes y jueves, en distinto horarios y de acuerdo a la edad y género de los y las deportistas. Además, dado el número de jugadores y niños/as en la Escuela, se incorporaron más profesores con el objetivo de tener un mejor control de las clases.
“Notamos una gran mejoría en cuanto a movimientos y respuestas motrices en situaciones de juego. En este tiempo de entrenamiento la respuesta fue excelente”
En lo que repecta a la continuidad del torneo, de acuerdo a Romano, se encuentran “esperanzados” con la idea de que para la segunda mitad de año se regularice la competencia y de esta forma “poder continuar y desarrollar este gran y ambicioso proyecto para la comunidad de la zona”.
